El viernes 12 de febrero me acerqué por el Amadeo Roldán.
Me acerqué a dos señoras, al azar, a fin de interesarme por las entradas. Al preguntar, una de ellas me atendió excelentemente, con una voz grave, profunda, lenta, bien modulada. Comencé a rebobinar, mientras me fijaba en su pelo rubio bien peinado,
elegancia general, postura como si estuviera en puntillas. Me vi de pronto en una de aquellas aulas que daban al patio de educacion física, sobre las dos de la tarde, mientras la brisa invitaba al sueño sin tener en cuenta a la profesora que disertaba sobre un tema que, entonces, no resultaba tan ameno. Aún cuando ya estaba claro,
pregunté:
- Por favor, ¿Cual es su nombre?
- Elena Alavez.
La recordarán todos; profesora de Historia en onceno grado.
Iniciamos el diálogo acostumbrado en esos casos, y pude enterarme que:
- Ida Ascaño y Adla Chaman ya fallecieron.
- Fajardo está muy enfermo (crei entender que ciego). Su casa
se está derrumbando, sólo le quedan en piue dos ahbitaciones.
- Maria Pernas estás muy bien (prfesora de historia de décimo de
"los viejos") y conversa con ella con frexuencia.
Esta profesora en general mantiene contacto con la mayoria de los
profesores de aquella época.
Bueno, espero que este mensaje les traiga recuerdos múltiples.
Eugenio Vicedo.
